Copa del Rey 2013-2014: el Real Madrid campeón ganando 1-2 al Barça

Tres años después, ante el mismo rival y de nuevo con Mestalla como escenario el Real Madrid se ha vuelto a proclamar Campeón de la Copa del Rey. El conjunto blanco se impuso con tantos de Ángel Di Maria y Gareth Bale que marcó un golazo cuando el partido iba encaminado a la prórroga con el que dio el título a su equipo.

Antes de ese momento el Madrid había sido superior, con más ocasiones pero menos posesión en un partido poco brillante en el que el Barça tuvo el balón pero le costó crear ocasiones claras aunque encontró a Bartra en un córner para poner el 1-1 a falta de 20 minutos para el final. La prórroga parecía cerca pero Bale en una contra, la propuesta del Madrid durante todo el partido, dejó clara la razón por la que se ganó el apodo de expreso de Cardiff con una carrera desde su campo que acabó en gol.

Las bajas con las que llegaban ambos equipos al partido obligaron a Martino y Ancelotti a mover el banquillo. El técnico argentino finalmente recuperó a Bartra para el centro de la defensa donde estuvo acompañado por Mascherano y volvió a contar con Cesc dejando a Pedro en el banquillo. En el Madrid se apostó por Isco para suplir a Cristiano cambiando el dibujo táctico y la idea funcionó porque el malagueño estuvo muy bien con el balón, dando pausa en algunos momentos e iniciando las salidas a la contra además de desgastarse bien en defensa como todo su equipo.

El Madrid comenzó con la idea clara de adelantar la defensa, intentar presionar arriba y salir con contras rápidas. En los primeros minutos la táctica dio buen resultado porque el Barça se encontraba muy incómodo y el Madrid encontraba ocasiones con incorporaciones por banda de Bale que tuvo un par de disparos que se le fueron excesivamente cruzados.

A los 10 minutos llegaría el primer tanto blanco tras una pérdida del Barça en la que Isco, Bale y Benzema tocaron de primera para dejar a Di Maria con ocasión de disparo que fue cruzado y raso batiendo a Pinto que lo tocó pero que vio como el balón atravesaba mansamente la línea de gol. El gol premiaba el esfuerzo del jugador argentino que estuvo hiperactivo durante toda la primera mitad siendo el mejor junto con Isco aunque sin olvidar a Benzema que paró muchos balones de espaldas y estuvo participativo.

Con el paso de los minutos el Madrid se reafirmó en su idea de las contras a la vez que se iba echando más atrás, algo que agradeció el Barça que comenzó a merodear por el área de Iker Casillas con Neymar e Iniesta buscando los espacios y con las incorporaciones por banda de Alves y Alba. Un remate de Alba y un tiro de Messi desde la frontal fueron las ocasiones más claras de los azulgranas que tenía el 64% de la posesión. Mientras el Madrid intentaba buscar jugadas rápidas y tuvo su mejor opción con una incursión por la izquierda en la que Bale cedió a Isco cuyo tiro desde dentro del área fue taponado por Mascherano.

El partido se fue al descanso con 1-0 y más emoción que brillo porque el Barça no había conseguido hilar su fútbol de costumbre y el Madrid se había retrasado tras el gol cuando tenía la oportunidad de seguir presionando al Barça para buscar el segundo. Este guión no cambió en la segunda mitad porque el Real Madrid siguió buscando jugadas rápidas, a veces en exceso porque el marcador le daba la oportunidad de mantener el balón en determinadas ocasiones. Bale, Benzema y Di Maria se plantaron en varias ocasiones cerca del área del Barça pero no tuvieron acierto y en ocasiones también estuvieron excesivamente individualistas.

De una manera o de otra el gol de la sentencia no llegaba así que el Barça tenía vida y buscaba el gol hasta que lo encontró a la salida de un córner. Bartra había avisado a Casillas con un disparo lejano y poco después le batía con un gran remate de cabeza tras el saque de esquina que Xavi puso a la perfección.

A partir de ahí quedaban 20 minutos y el Barça parecía pasar a ser favorito porque tenía más el balón. El Madrid siguió con su idea de las contras y encontró premio con un espectacular gol de Bale. El galés arrancó desde su campo, fue empujado por Bartra que le sacó del campo pero aún así siguió la jugada, volvió a entrar en los límites del terreno de juego y se plantó delante de Pinto al que batió por debajo de las piernas.

Al Barça le quedaron muy pocos minutos para reaccionar pero tuvo el empate en las botas de Neymar, mucho más activo que un apático Messi, que se quedó solo ante Casillas y envió al palo. Ancelotti puso en el campo a Varane y Casemiro, la táctica ya era aguantar el resultado como finalmente ocurrió así que otra Copa para el Real Madrid tras la decepción del año pasado, sin Cristiano Ronaldo y sin incidencias ni problemas entre los jugadores en el campo donde reinó la deportividad, cosa que los aficionados también agradecemos.

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