Fallece el jugador del Livorno Morosini

Fallece el jugador del Livorno Morosini

Escrito por: Adrián Peña    15 abril 2012     2 minutos

El jugador italiano del Livorno, Piermario Morosini, sufrió ayer un ataque al corazón en mitad de un partido, donde rápidamente fue atendido por las asistencias médicas y trasladado al hospital más cercano, en el cual falleció horas después.

Desgraciadamente, el jugador de 25 años cedido por el Udinese, se convierte en el último caso de una larga lista de jugadores fallecidos a causa de paros cardíacos o derrames cerebrales. El último susto lo hemos vivido en Inglaterra, tras el desplome en el césped de Muamba, jugador del Bolton, mientras se enfrentaba ante el Totteham en los cuartos de final de la FA Cup.

En España también hemos sufrido acontecimientos similares. Antonio Puerta, una de las jóvenes promesas del fútbol español, falleció en 2007 en el hospital, dos días después de que se desplomase a la media hora de partido en el que se enfrentaba el Sevilla y el Getafe y que abría la nueva temporada. Dos años después su muerte fue nuevamente recordada tras el fallecimiento del capitán de 26 años del Espanyol, Dani Jarque, cuando hablando por teléfono de la habitación del hotel donde se encontraba sufría un infarto.

Rubén de la Red corrió un poco más de suerte. El ex jugador del Real Madrid cayó desplomado en 2008 en pleno partido a causa de un síncope que le obligó a alejarse definitivamente de los terrenos de juego. En la actualidad, se encuentra preparando a los jóvenes jugadores de las categorías inferiores del club blanco.

Numerosos estudios se han realizados para averiguar el porqué de este tipo de acontecimientos en jugadores, ya que al estar preparados físicamente, deberían ser los que menos probabilidades tienen de que les ocurra, pero todavía no se encontrado el motivo exacto.

Tras la muerte de centrocampista Morosini, el fútbol mundial se viste de luto. Esperemos que no tengamos que ver más brazaletes negros en los brazos de los jugadores y que de nuevo no se tiñan de oscuro los corazones de las personas.

Vía | Marca