La quinta etapa de la Vuelta a España 2013 se ha resuelto al sprint. Sí, al sprint. Sí, en la Vuelta a España. De eso se han encargado varios equipos, pero principalmente los australianos del Orica GreenEDGE, que no estaban dispuestos a dejar escapar una de las pocas oportunidades que tienen los velocistas de brilla en la ronda española, con la meta hoy en el Lago de Sanabria.
Esta última semana se ha disputado el Tour de Polonia, una carrera con 70 ediciones de historia ya, aunque sólo para profesionales desde 1993. Una carrera que en este año 2013 se disputaba bajo un nuevo formato, con algunas novedades que la UCI quería probar y que, ciertamente le han dado un nuevo sentido a la carrera y mucha emoción.
Al equipo Orica GreenEDGE le ruedan bien las cosas. Quitando la anécdota del autobús empotrado en meta de la primera etapa, la escuadra que dirige Neil Stephens se está dejando ver mucho en carrera y además ya suma dos victorias de etapa. La primera llegó ayer con la sorprendente victoria de Simon Gerrans (Orica GreenEDGE) y la segunda ha llegado hoy, con la victoria de la escuadra en la crono por equipos.
Al eslovaco Peter Sagan (Cannondale) se le escapó la etapa de ayer tras el pulso que le ganó al pelotón Jan Bakelants (Radioshack), y hoy se le ha vuelto a escapar después de que el australiano Simon Gerrans (Orica GreenEDGE) le haya batido contra pronóstico en un sprint. Seguro que en las cuentas del eslovaco no se contemplaba lo de salir de vacío de las etapas en Córcega.
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