Entrevista con Juan Carlos Navarro, capitán de la selección española de baloncesto

Entrevista con Juan Carlos Navarro, capitán de la selección española de baloncesto

Escrito por: Javi    22 agosto 2010     5 minutos

El mejor representante de la llamada generación de oro del baloncesto español es Juan Carlos Navarro. Desde que llegó a la selección en el año 2000, tras proclamarse campeón de Europa y del Mundo en categoría junior, el escolta español no se ha perdido un torneo con la selección absoluta desde entonces. Se podría decir que no ha tenido muchas vacaciones.

Con más de 150 internacionales, el capitán de la selección española y del Regal Barça nos habla de la ambición y las expectactivas del equipo, de la convivencia del grupo sin Pau Gasol y de la presión, uno de los grandes enemigos, justo antes de afrontar el esperado encuentro amistoso ante los Estados Unidos, junto a España, el gran rival a batir en el Mundobasket que está a punto de comenzar.

Pregunta: ¿Qué palpito percibe en el equipo?.

Respuesta: El de siempre. Estamos haciendo un buen trabajo y viajamos con las expectativas de hacerlo bien. Tenemos un buen grupo y podemos hacer un buen Mundial.

P.: ¿Existe algún pegamento invisible, un secreto que explique la buena química?.

R.: La calidad es la clave. Tenemos dos o tres jugadores por posición que lo pueden hacer muy bien. Además, somos buenas personas y eso se nota en el buen rollo que existe. Así se ha formado un grupo que tiene un espíritu claramente ganador.

P.: ¿Son consignas que surgen o se transmiten de generación en generación de internacionales?.

R.: Imagino que se transmiten. Los nuevos que llegan saben que entran en un buen grupo y no les cuesta nada. Desde el primer momento son buen recibidos y llegan con hambre de hacerlo bien y ganarse un puesto. En mi caso, cuando entré en el 2000, me recibieron muy bien y yo lo sigo haciendo con los que vienen.

P.: El deporte español ha cambiado tanto que ahora no sorprende que la selección de baloncesto se auotoproclame favorita a todo.

R.: Este equipo siempre ha aguantado bien la presión. Los resultados demuestran que no tenemos que ponernos techo. Hemos estado arriba en todas las competiciones y no tiene por qué ser distinto en este Mundial. Iremos paso a paso, pero nos hemos ganado el respeto de todos.

P.: ¿Sería un error pensar en Estados Unidos como el único rival con el que se van a encontrar?.

R.: Hay muchos rivales antes de llegar a ese hipotético cruce. Habrá que trabajar mucho para cruzarse con los americanos.

P.: Los estadounidenses llegan sin sus estrellas y difieren de la idea que se tiene de un dream team.

R.: No están las estrellas más brillantes. Pero aunque se trata de un equipo de segunda línea, tiene una calidad impresionante y sus jugadores pueden llegar con más hambre de hacerlo bien. Sin dudad, entra entre los favoritos pero sabemos que ellos también nos ven a nosotros así.

P.: ¿Va a ser el Mundial de Turquía el Mundial de las ausencias?.

R.: Hay muchos motivos diferentes. Pau se merece un descanso. Lo ha hecho bien en su equipo y con la selección y este año lo ha ganado todo. Allí las temporadas son muy complicadas por su intensidad.

P.: Los equipos europeos punteros no le van a la zaga en partidos jugados a los de la NBA.

R.: Sí. Al final, casi juegas los mismos partidos que en su liga regular, aunque ellos tienen un calendario mucho más comprimido y por tanto, más estresante.

P.: España sin Pau Gasol. Hay que hacerse a la idea.

R.: Hay que mirar hacia adelante, lo tenemos claro desde el primer día. Cada año se empieza de cero con los jugadores que estén.

P.: ¿Puede venir bien su falta para que alguien se reivindique?.

R.: Vamos a dejarlo en que es una motivación para que todo el mundo rinda al máximo nivel. Tampoco vamos a presionarnos cuestionándonos qué es lo que vamos a hacer o no sin Pau.

P.:La era Scariolo arrancó en Polonia. Se ganó el oro en Katowice , pero con una dosis inesperada de sufrimiento.

R.: Sí. Allí ya habíamos ganado el Eurobasket antes de jugarlo y mira como empezamos. Está claro que firmaríamos el guión de empezar mal, mejorar y acabar como lo hicimos quedando campeones, pero queremos estar más tranquilos y arrancar mejor.

P.: En esas situaciones se malgasta energía.

R.: Es más el peso de toda la gente que se te echa encima. Pero somos profesionales y nos ha pasado también en nuestros equipos.

P.: ¿Sienten que hay muchos puntos de mira en sus cabezas?.

R.: Es el deporte nacional, esperar que las cosas te vayan mal para pegarte el palo, pero tampoco estamos demasiado pendientes de eso. Vamos a intentar hacerlo bien y dar el máximo, pero hay que entender que llegará el momento en el que no se consigan los éxitos a los que estamos acostumbrados. La gente tiene que entenderlo.

P.: En Sudáfrica se asistió a vergonzosos ejemplos de antifútbol. ¿Puede ocurrir lo mismo en el Mundial de basket?.

R.: De eso puedo hablar en primera persona. Estoy acostumbrado a que me intenten sacar del partido a base de jugar muy físico. Todos corremos ese riesgo ante gente inferior técnicamente pero llevamos muchos partidos encima como para estar ya acostumbrados. Claro que reconozco que te estoy diciendo esto y a veces soy el primero en calentarme.