NBA Finals 2014: San Antonio vuelve a asaltar Miami y se queda a una victoria del anillo
Los San Antonio Spurs volvierona dominar a Miami Heat en este cuarto partido de las series de las finales de la NBA comandados esta vez por un Kawhi Leonard espectacular que llegó a sumar 20 puntos y 14 rebotes ante unos Heat inoperantes en ataque con un LeBron que no pudo hacerlo todo a pesar de sus 28 puntos.
Sin embargo no fue el ala pivot de Akron sino Chris Bosh quien sostuvo a los Heat en un primer cuarto en el que los Spurs golpearon primero y con contundencia basados en el tiro exterior de Danny Green y Tony Parker colocando un 4-13 que obligaría a Spoelstra a parar ante el vendaval que se le venía encima. Surgió efecto y el ex de los Raptors acercaba la contienda a pesar de que James se marchaba al vestuario con molestias.
Pero a pesar de la vuelta de LeBron al partido, el duelo de segundas unidades a finales del primer cuarto comenzó a desequilibrar el partido del lado tejano con Patty Mills aportando buenos minutos para cerrar el primer periodo con 17-26 a su favor.
El propio Mills fue quien siguió liderando en el segundo cuarto mientras Miami se veía incapaz de adivinar si quiera las intenciones de los entramados ofensivos de Popovich, cuya complejidad y perfecta ejecución servían para colocar el +20, ventaja que se movería poco ante la falta de aporte de la peor cara de Wade y un LeBron desesperado incapaz de mantener la cabeza fría.
El 36-55 con el que se llegaba al descanso era una ofensa grave para Miami en su propia casa y fruto de tal golpe llegó la rabia de James, traducida esta vez en fructíferos resultados para los suyos. El fuerte inicio del número 6 sirvió para recortar distancias hasta los 13 puntos, pero esta vez era Diaw, en un ejercicio que demostraba con creces la extrema amplitud de la rotación de «Pops», quien tomaba el mando y dejaba las cosas tal y como estaban al final del cuarto, colocando el 57-81.
La entrada en el último período solo sirvió para despertar a Wade que tiró de unos decaídos Heats, aunque sin demasiado entusiasmo. Miami pronto aceptó su destino y reservó a los jugadores importantes, finiquitando el partido con demasiados minutos de la basura ante el dominio de unos Spurs que nunca pasaron apuros en el encuentro.
Con el 3-1, San Antonio tiene la posibilidad más que real de proclamarse campeón en Texas el próximo domingo, mientras que Miami se enfrenta al reto de remontar dos match balls ante un equipo que tiene en la prevención de errores su principal virtud.
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