El DKV Joventut se impuso ayer en un emocionante partido al Tau Vitoria y se proclamó por octava vez campeón de la Copa del Rey de Baloncesto. El partido fué de menos a más. Comenzaron con mucho respeto ambos equipos, lo que hizo que el primer cuarto estuviera lleno de nervios e imprecisiones y tuviera un escaso tanteador (14-13). En el segundo cuarto, el Tau salió más enchufado y se llegó a marchar por 10 puntos. Sin embargo, una falta antideportiva sobre Sonseca y una técnica a Mickeal permitieron a DKV recortar diferencias y llegar con 33-30 al descanso. En la segunda parte, el Tau siguió dominando el partido, aunque con ventajas cortas que no superaban los 5 puntos y en La Penya, tan sólo Rudy anotaba y mantenía a su equipo en el partido.
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