El milagro del Levante

Tras 102 años de historia, el Levante ha terminado por primera vez una jornada como líder en solitario. Esta situación, evidentemente, resulta anecdótica pero no esto no desmerece que les dediquemos a unas palabras a este club, y más en las circunstancias especiales en las que se ha producido esta situación.

Y es que el Levante Unión Deportiva es el equipo con el menor presupuesto de la categoría, los más pobres, y tiene la media de edad más alta, los más viejos. Además, tienen un entrenador inexperto en Primera División. Vamos, que el Levante Unión Deportiva está rompiendo algunos de los tópicos más manidos del mundo del fútbol, al menos durante unos partidos, y bien que estamos disfrutando de ello.

Resulta increíble, y suena fuerte decirlo pero en líneas generales es así, pero el Levante está formado por despojos, por los jugadores que ya nadie quería, bien porque ya superan la treintena y se supone están en el declive de sus carreras, o bien porque ya nadie tenía ninguna esperanza en ellos, como es el caso de Koné. ¿Quién iba a decir que el delantero africano iba a volver a marcar goles?.

Algunos hablaban de que el secreto del Levante era Luis García Plaza. Pues bien, Luis García ya no está, está en Getafe y por cierto recibiendo críticas de quienes hace sólo unos meses no paraban de tirarle flores. Ahora tampoco está Fernando Caicedo, cuyos goles la temporada pasada fueron vitales para la permanencia del equipo en Primera División.

Entonces, ¿cuál es la fórmula mágica?. Creo que no existe y no hay que empeñarse en buscarla. Se trata del discurso de siempre, trabajo, creérselo pero sin perder la humildad, «cojones», etcétera … Una serie de factores que, unidos a la suerte, conforman lo que yo llamo el milagro del Levante, y es que, no es común que se den todo este tipo de circunstancias a favor y en el equipo granota se están dando a día de hoy.

¿Cuánto va a durar esta situación?. Pues lo lógico es que la imbatibilidad del Levante dure poco, y quien sabe si en el siguiente partido ya la habrá perdido y comenzará su cuesta abajo. Pero la guerra del equipo granota es la permanencia, una guerra para la que necesitan 43-44 puntos y para la que ya han conseguido 20. Los de J.I. Martínez ya han hecho casi la mitad del trabajo, y no llevamos ni un cuarto de temporada.

Me alegro mucho de que la afición levantinista, de la que guardo gratos recuerdos cada vez que me la he cruzado en un estadio de fútbol, esté disfrutando como nunca de su equipo. Creo que en 102 años de historia se han ganado su minuto de gloria.

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