La RFEF no podrá acceder a las conversaciones que relacionan al Hércules con la compra de partidos

Como os comentábamos en el día de ayer, la posible compra de partidos por parte del máximo accionista del Hércules (Enrique Ortiz) es muy probable que quede sin sanción deportiva. Hoy se ha dado un paso más en ese sentido ya que desde los juzgados de Alicante se ha rechazado el envío de las escuchas telefónicas sobre el caso a la Real Federación Española de Fútbol y el Consejo Superior de Deportes.

Las escuchas telefónicas a Ortiz fueron autorizadas para esclarecer su relación con delitos graves de cohecho y tráfico de influencias. Casualmente, se obtuvo información sobre la compra de partidos y se solicitó que ésta fuera enviada a las entidades deportivas para que tomaran medidas. Sin embargo, desde los juzgados de Alicante se ha negado esta posibilidad ya que se indica que supondría “una intromisión en la intimidad”.

Además, Ortiz se va a ver beneficiado porque en nuestro país todavía no es considerado como delito el amaño de partidos. Este hecho cambiará a finales de año cuando la reforma del Código Penal considere como delito la alteración de resultados deportivos.

En definitiva, un complejo entramado de recovecos legales que van a permitir a Ortiz y al Hércules escaparse sin castigo alguno por este tema ya que las autoridades deportivas no tienen las pruebas y los mecanismos legales para que sea castigado.

Sin duda la afición del Hércules no es culpable de las acciones de su máximo accionista pero al menos deberían de poder tomarse medidas que inhabilitaran a Ortiz de la gestión de entidades deportivas después de jactarse de su capacidad para amañar la competición.

Vía | El País

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