El pivot francés Frederic Weis deja el baloncesto a los 33 años

Se va un tipo grande, tan grande dentro de la pista como fuera de ella, y no sólo de altura según cuentan amigos, compañeros de profesión y las distintas aficiones de las distintas camisetas que ha defendido. Hace unos días, el francés Frederic Weis disfrutaba de sus últimos minutos como jugador de baloncesto profesional, en un Limoges – Chorale Roanne de la liga gala.

Con 33 años, Weis se retira tras 16 años de carrera, muchos de ellos en España, y con las rodillas prácticamente destrozadas, lo que ha terminado de acelerar un proceso ya natural dada su edad. Se retira un pivot gigantesco de 2’18 metros de altura, de brazos larguísimos, y por ende, buen reboteador y buen intimidador.

Weis debutó en el mismo equipo en el que se retiró, el Limoges, y no llegaría hasta la Liga ACB hasta el año 2000, un año antes de que los Knicks lo eligieran en el puesto 15 del draft y después de un breve paso por el PAOK de Salónica. Su primera estación en nuestro país sería Málaga, y vaya si en la Costa del Sol guardan un buen recuerdo del gigante francés.

Con Weis, el Unicaja ganó su primera Copa Korac, la misma que un año antes se le escapó precisamente frente al Limoges en el que juugaba el pivot francés. Tras cuatro años con Unicaja, Weis se marchó a Bilbao, donde dejó más grato recuerdo aún si cabe. El francés estuvo cinco años en el equipo vasco, y participó en la positiva evolución del mismo, de ser un recién ascendido a ser un equipo que pelea por los playoffs.

Con la selección francesa tenemos que sumar un bronce en un Eurobasket y la plata olímpica de Sidney 2000, en un torneo en el que la selección francesa tocó techo, pese a que Vince Carter voló literalmente por encima de Weis. Muchos tendrán en mente esa imagen como recuerdo del pivot francés. Si es así, tiren de videoteca y descubran al verdadero Fredzilla.

Vía | Málaga Hoy

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