Hace 10 años, la Real Sociedad jugó la Liga de Campeones por primera vez y única vez en su historia. Por entonces, su aventura acabó en octavos de final y el equipo que arrojó fuera a los donostiarras fue el Olympique de Lyon. Esta vez, el destino ha querido que los franceses se crucen de nuevo en el camino de los realistas, pero esta vez parece que la historia va a ser bien diferente.
Cuando el Real Madrid ganaba 0-2 en Amsterdam, el Olympique de Lyon, que perdía 1-0 ante el Dinamo de Zagreb, necesitaba conseguir al menos 7 goles para poder clasificarse a los octavos de final de la Liga de Campeones. Y los consiguió. Para algunos, esto debe ser tomado como una hazaña pero para muchos otros, esta machada del equipo francés es más que sospechosa, y ahora analizamos el porqué.
En el Grupo A, Tottenham e Inter de Milán se jugaban la primera posición del grupo, pero ninguno de los dos equipos consiguió la victoria, así que la cosa poco ha cambiado. Los ingleses se quedan en cabeza tras empatar a 3 en un partido loco que ante el Twente holandés, que por 3 veces igualó el partido. En cambio, el equipo italiano cayó por 3-0 ante el Werder Bremen y Rafa Benítez se lleva un nuevo rapapolvo.
El Tottenham Hotspurs es el nuevo líder del Grupo A tras vencer por un claro 3-1 al Inter de Milan de Rafa Benítez. Ingleses e italianos son los máximos aspirantes a pasar a octavos de final, ambos con 7 puntos. Con 5 puntos en la tercera posición se sitúa el Twente holandés, que ha logrado la primera victoria de su historia en la Liga de Campeones tras derrotar al Werder Bremen a domicilio por 0-2. Los alemanes, con sólo 2 puntos, están prácticamente eliminados.
Tras los grandes resultados que han conseguido, Barça y Valencia lideran sus respectivos grupos. En el Grupo D, los azulgranas comparten ese honor con el Copenaghe, que venció por 1-0 al Rubin Kazan gracias a un gol en el tramo final de N'Doye. Mientras, en el Grupo C, saltaba la primera sorpresa de la noche ya que el Manchester United era incapaz de superar al Glasgow Rangers en Old Trafford, en un insulso partido que terminó sin goles.
No hace ni un mes que terminó el Mundial de Sudáfrica 2010, y sin embargo, en varios países de Europa ha comenzado la competición oficial. Por ejemplo, os contábamos como el Manchester United ha ganado la Community Shield o como el Bayern de Munich ganó la Supercopa de Alemania. En otros países, como Francia, Holanda y Bélgica, este fin de semana ha echado a andar su competición liguera.
En el Estadio Gerland de Lyon, el Bayern Munich no solo defendió la renta que traía del partido de ida, sino que además derrotó por un claro 0-3 al Olympique. Por tanto, el conjunto de Louis Van Gaal se convierte en el primer finalista de la Liga de Campeones. Arjen Robben ya puede preparar las maletas porque va a regresar al Bernabeu vestido con los colores del equipo bávaro.
Una vez más, y ya hemos perdido la cuenta, Arjen Robben ha vuelto a ser decisivo para el Bayern de Munich. Un gol del holandés ha resuelto la ida de la eliminatoria entre Bayern y Olympique de Lyon. Un partido bastante soso, porque ni los alemanes mostraron muchos argumentos en ataque ni los franceses se parecían en absoluto a aquel equipo que eliminó al Real Madrid. Todo lo contrario, hemos visto un Lyon conformista incluso con la derrota, y que desperdició probablemente una oportunidad única.
El Bayern Munich se ha vengado de aquella trágica noche de 1999 logrando una remontada que, si bien no le ha servido para derrotar hoy al Manchester United, le ha valido para eliminarlo y colarse en las semifinales de la Champions League. Incomprensiblemente, el United ha dejado escapar una oportunidad única, y es que los ingleses ganaban cómodamente por 3-0 en 40 minutos y acabaron cediendo dos goles para caer eliminados por el valor doble de los goles fuera de casa.
A estas alturas de la Champions League, los errores se pagan. Que se lo pregunten a Demichelis, que en el minuto 1 se olvidó de marcar a Rooney y dejó que el delantero marcara el 0-1 a placer. O que se le pregunten a Ferguson, cuyos experimentos le han costado el partido al United, que no la eliminatoria, porque un 2-1 para el Bayern y en Old Trafford no es mucha ventaja para los alemanes. El Manchester comenzó tan pronto a ganar como a perder.
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